sábado, mayo 21, 2005

Cuando las cosas no salen como uno quiere

Tanto frío que hace. Por fin puedo escribir, esta semana estuve bastante ocupada debido al cortometraje que, con mi grupo de compañeros, tuvimos que grabar. El miércoles con lluvia torrencial (día en que por fin nos pusimos de acuerdo para grabar) fuimos a la casa de la abuela de un compañero. Esa sería nuestra única locación y menos mal que todo era en el interior, porque de haber sido afuera no hubiésemos podido grabar de ninguna forma.

Teníamos los minutos contados, ya que nuestros actores tenían cosas que hacer y mal que mal nos estaban haciendo un gran favor. Yo veía imposible que hicieramos todo lo que debíamos hacer en menos de dos horas, los actores se tenían que ir como máximo a las 16:00 hrs. y habíamos llegado a la casa como a las 13:30 de la tarde. Tratamos de apurarnos, arreglamos las respectivas piezas, utilería, vestuario (por cierto, todo muy precario y básico ya que no somos expertos, le pusimos harto de nuestra cosecha).

Entre risas, equivocaciones, repeticiones eternas de escenas, pudimos grabar lo que teníamos previsto y la buena disposición (y voluntad) de nuestros actores nos hizo terminar como a las 18:00 hrs. Nuestra escena final fue en una funeraria, muy tétrico eso, rodeados por ataúdes de distintas formas y colores y el “sepulturero” (él no supo definir su oficio, podría ser hasta algo así como encajonador ¿?) que nos empezó a contar lo que hacía allí, algo como vestir a los muertos, maquillarlos y otras cosas que no voy a comentar porque pueden afectar la sensibilidad de quien esté leyendo (en serio, a mi me dio nervios). El día terminó con casi todas las grabaciones del corto y yo llegué empapadísima a mi casa luego de que me mojara un auto y atravesara infinitas posas de agua.

Al otro día (jueves) teníamos que editar y grabar la última escena, así lo hicimos, estuvimos toda la tarde, hasta como las 21:00 hrs editando, harto complicada la cosa, más encima el programa que usan en la U (final cut) nos dio N problemas.

En fin, resultados de todo el proceso: me molesta en demasía la irresponsabilidad, cuando se hacen trabajos en grupo se espera que todos aporten, pero desgraciadamente no siempre es así y por culpa de esas mismas personas los trabajos no salen como uno espera, terminamos de editar el viernes con tres personas de mi grupo (incluida yo) y los otros….. quien sabe, uno tenía que trabajar, se excusó, pero los otros, ni señas. Y más rabia me da aún porque todo lo hicimos a última hora, hubo tomas que salieron mal y ya no estábamos a tiempo de hacerlas nuevamente, por lo que el “producto final” me dejó muy disconforme. Cuando uno hace estas cosas, está predispuesto a que los resultados sean buenos y de calidad, principalmente si es para la U. Pucha que me da rabia, pero ya, no seguiré escribiendo porque me acuerdo y me da coraje, esto lo tomaré como lección para el próximo trabajo que al parecer va a ser un documental, el que no trabaje, pa´ la casa!!!

Salu2 a todos, abríguense el doble, el triple, se los dice una friolenta sin remedio!


Palabra del día:
=>Moraleja: Lección o enseñanza que se deduce de un cuento, fábula, ejemplo, anécdota, etc.

5 Comments:

Blogger Rod said...

la verdad q los trabajos en grupo sirven pa q algunos se aprovechen y terminen no haciendo nada.. y eso obvio q da rabia
saludos

7:13 p.m.  
Anonymous Anónimo said...

Al final este tipo de cosas son las más útiles para que aprendas a enfrentarte a los problemas que tendrás pronto en tu vida profesional. Lo bueno es que en general la relación entre flojera y fracaso es directamente proporcional y viceversa, aunque no siempre (conozco a algunos vagonetas a los que les va estupendo...).
Buena semana y abrígate.

7:55 a.m.  
Blogger Carly said...

uy que rabia...la gente así es para cachetearla jajaja...
Pero, sabes? esas cosas a la larga te enseñan y después sabes como enfrentar ese tipo de situaciones...


....yo ODIO cuando me mojan los autos...hay ociosos que encuentran entretenido andar rajados por las calles mojadas y mojar a los pobres peatones como nosotros.

10:02 p.m.  
Anonymous Anónimo said...

Recuerdo cuando en la U teníamos los trabajos grandes de tv... grupos de 20 a 30 personas para hacer un programa... y típico que los que trabajaban eramos los mismos 5 de siempre. En especial recuerdo uno en que fui director de la segunda unidad, camarógrafo en el set, editor general del programa, creador de las continuidades (consiguiéndome un amigo con auto, una cámara y saliendo a grabar santiago de noche, para luego editar las 6 continuidades de 2 minutos cada una... cuando los demás grupos simplemente grabaron los comerciales de la TV), editor de los insertos (entrevistas de varios tipos en forma de encuesta para presentárselas a los entrevistados)... ese 6 fue mio, y casi exclusivamente mío.
Detesto los trabajos en grupo. Máximo 3 personas. El resto no sirve.

12:17 p.m.  
Blogger Bada said...

Ciertamente que todos estamos de acuerdo que los trabajos en grupo no son más que un trabajo de máximo tres integrantes del grupo, del resto nada. Pero bueno, en el futuro les esperará lo que les corresponde debido a la irresponsabilidad.

Gracias a todos por sus comentarios !!!

8:17 p.m.  

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